Prevención de la condensación en interiores
Que se acumule agua en tus ventanas nuevas es una mala señal. ¿O no? Que veas humedad en los cristales no significa necesariamente que tus ventanas no estén sellando bien o que estén mal instaladas. Podría significar que tu casa tiene un problema de humedad.
Comprensión de la humedad, la condensación y el flujo de aire
Todas las casas tienen humedad en el aire, y esto es bueno. Sin ella, los muebles se secarían y agrietarían, las juntas y los montantes de la casa se encogerían y torcerían, y la pintura y el yeso se desintegrarían.
Demasiada humedad en el aire tampoco es buena. Cuando hace frío afuera y calor adentro, la humedad entra en contacto con superficies como ventanas, espejos, paredes del baño y tuberías de agua fría, donde se condensa y causa diversos daños por agua.
¿Y de dónde viene todo esto? De muchos lugares. Las duchas, los lavavajillas, las lavadoras y secadoras, las plantas de interior e incluso los humanos y las mascotas pueden generar humedad, lo que a su vez causa condensación.
Casas antiguas y niveles de humedad
Se podría pensar que las casas antiguas son más propensas a problemas de condensación y humedad, ya que generalmente son menos eficientes energéticamente, pero eso no es necesariamente cierto. En muchos casos, la condensación es un problema menor debido al envejecimiento y a los sellos deficientes en puertas y ventanas, lo que permite una mayor circulación del aire.
Desafortunadamente, el mayor flujo de aire y la menor humedad significan que sus facturas de energía probablemente sean más altas. Sin embargo, al reemplazar las ventanas y puertas desgastadas, podría volver a aparecer condensación en las ventanas debido a la menor circulación de aire y al exceso de humedad dentro de la casa.
Humedad en casas nuevas
Las casas nuevas tienen la ventaja adicional de ser mucho más herméticas y energéticamente eficientes que las antiguas. Al fin y al cabo, tienen mejor aislamiento y ventanas y puertas recién selladas. También tienen láminas de plástico en el interior de las paredes exteriores, llamadas barreras de vapor, que impiden que el aire y la humedad las atraviesen. Y funciona.
Tus facturas de energía sin duda serán más bajas, pero también significa que tendrás que controlar más de cerca los niveles de humedad en tu casa. Al igual que con las casas antiguas, necesitas encontrar y mantener los niveles de humedad adecuados.
Monitoreo y control de la humedad dentro de su hogar
El aire demasiado seco puede causar tanto daño como el aire con demasiada humedad. Necesita encontrar el nivel de humedad adecuado para su hogar, monitorearlo y tener alguna forma de controlarlo. Para saber exactamente cuáles son los niveles de humedad en su hogar, invierta en un medidor de humedad que puede conseguir en cualquier ferretería o tienda de artículos para el hogar. Solo asegúrese de conseguir un aparato de calidad para obtener lecturas precisas. Y si tiene dudas, consulte con un experto.
Revisar las ventanas para detectar condensación también ayuda a evaluar los niveles de humedad en su hogar. Si nota que se empieza a formar condensación en la cara interior del vidrio, límpiela y reduzca la humedad abriendo las ventanas, usando un extractor de aire o un deshumidificador y minimizando la fuente de humedad.
Condensación entre el vidrio
Las mismas causas de acumulación de agua en el interior de las ventanas y puertas también pueden causar condensación entre los paneles de vidrio de las ventanas y puertas de diseño. En este caso, revise los paneles de vidrio con bisagras para asegurarse de que se hayan retirado los separadores de envío y que el panel esté completamente cerrado. Para comprobarlo, simplemente presione ligeramente en cada punto de cierre.
También puede ocurrir si el aire dentro de la casa está frío (por ejemplo, debido al aire acondicionado) y el aire exterior es extremadamente húmedo. En este caso, asegúrese de que no haya rejillas de ventilación que den directamente a las ventanas. También podría ser conveniente aumentar ligeramente la temperatura.
Humedad en el lado exterior de sus ventanas y puertas
Es normal que se forme condensación en el exterior de las ventanas y puertas por la mañana, cuando los días son cálidos y húmedos y las noches frescas. Esta humedad generalmente desaparece al subir la temperatura. También puede ocurrir cuando el aire exterior es cálido y húmedo, pero el interior es fresco. Aunque parezca increíble, esto es una buena señal. Significa que sus ventanas y puertas funcionan correctamente, así que no hay de qué preocuparse.
La condensación puede ser un poco alarmante, sobre todo si se encuentra en las ventanas y puertas nuevas, pero no tiene por qué serlo. ¡Incluso puede ser algo positivo! El truco está en controlar el nivel de humedad en casa y hacer ajustes sencillos pero rápidos para que todo funcione a la perfección.
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