Las ventanas y puertas de tu casa deberían ser lo último en tu lista de preocupaciones. Si las ventanas de tu casa son difíciles de abrir, tienen corrientes de aire, muebles descoloridos, son difíciles de limpiar o simplemente están sucias y feas, es hora de cambiarlas. ¿O no? ¿Y con qué las reemplazas? ¿Qué deberías buscar? Aquí tienes una guía rápida para ayudarte.

Su casa tiene ventanas y puertas ineficientes

Si sus ventanas y puertas dejan pasar el aire, es hora de cambiarlas. Incluso podrían estar empañadas o tener condensación entre los cristales. En este caso, busque ventanas y puertas con tecnología de vidrio aislante de alto rendimiento para evitar corrientes de aire. Este tipo de ventana evita que el vidrio conduzca el calor y el frío, lo que hace que su hogar sea más eficiente energéticamente y cómodo.

Ventanas antiguas de un solo panel

Calentar tu casa cuesta más que nunca. Lo último que quieres es que tus ventanas y puertas agraven el problema. Las ventanas de un solo panel no son nada eficientes energéticamente. Hacen que tu caldera funcione mucho más de lo necesario, acortándole años de vida útil y aumentando tus facturas de energía.

Reemplácelas por ventanas aislantes de baja emisividad (Low-E), de doble o triple panel. Esto reducirá considerablemente sus costos de calefacción y refrigeración. Para ahorrar aún más energía, busque productos con certificación ENERGY STAR®.

Alfombras, muebles y artículos del hogar descoloridos

Los rayos del sol pueden ser dañinos, incluso en interiores. Si ha notado que sus alfombras, muebles, cortinas y otros artículos se están descoloriendo, busque ventanas que bloqueen los rayos UV, como las que tienen revestimiento de baja emisividad.

No hay ruta de escape de emergencia

Todas las casas deberían tener varias salidas de emergencia. Y si las ventanas y puertas de su casa no abren fácilmente, o están pintadas o clavadas, existe un grave problema de seguridad. Si se produce un incendio u otra emergencia, es posible que no pueda salir de su casa a tiempo.

Son simplemente feos

Marcos desportillados y deteriorados, vidrios agrietados o rotos, herrajes dañados o faltantes y manchas de agua pueden restarle belleza a su hogar. Si su casa luce desgastada, descuidada o anticuada, podría ser el problema de sus puertas y ventanas. Reemplazar las ventanas y puertas puede mejorar drásticamente la belleza y el valor de su hogar, tanto por dentro como por fuera. Descubrirá mayor eficiencia energética, facilidad de limpieza y funcionalidad.

Las ventanas y puertas viejas pueden ser simplemente una molestia

Las ventanas viejas pueden ser un verdadero fastidio. Requieren muchísimo tiempo y esfuerzo para limpiarlas. Suelen ser difíciles de abrir y cerrar. Y encontrar piezas de repuesto puede ser difícil o incluso imposible. Además, hay que rasparlas y pintarlas regularmente para que luzcan como nuevas, incluso si ya pasaron de moda.

Las ventanas de reemplazo actuales de madera, fibra de vidrio y vinilo vienen en diversas configuraciones, tipos y estilos. Se abren con poco o ningún esfuerzo y son fáciles de limpiar y mantener, lo que justifica la inversión.